O bien soy un “seba” patriota, o cada dia me voy convenciendo que lo nuestro es lo mejor del mundo, que como Barcelona no hay nada; la misma ciudad de Bristol, que pasa por ser una gran población, me pareció que al lado de Barcelona era un mito, será porque la vi de noche y ya se sabe, que la noche es mala consejera y más si es en una población falta de luz, como aquella. Lo que no hay que negar es, que hay buenos establecimientos de todas clases, y mucho servicio de tranvias y autobuses lujosos. Ayer fuimos a un cine, que al igual que en todos los cines de Inglaterra, estaba llenísimo (se ve que tienen una afición loca) hicieron una película titulada “El hombre que se casó con su propia mujer”. Fuimos con el “avi” y con un convidado valenciano que tuvimos a comer, hijo de un frutero de valencia, y nada más de Bristol.
Juan