A finals de setembre i durant l’octubre de 1918, a la tornada del viatge a Manila, i des del moment que s’incorporen a la Mediterrània, han de navegar sempre en comboi per motius de seguretat. Van navegant canviant de comboi i també en algun viatge es perden degut al mal temps. D’aquestes vicissituds en destaca el que va ocórrer el 4 d’octubre de 1918.
A l’historial del Full de Serveis, Joan Espinàs deixa escrit: A la salida de Port-Said (Egipte) para Milo el buque se incorpora a un convoy compuesto de 23 buques de distintas nacionalidades. El dia 4 de Octubre, singladura 4 al viaje de Milo (illa grega) a Bizerta (ciutat de Tunísia) aparece un submarino alemán a pocas millas del convoy y es echado a pique por los cañonazos de un vapor mercante inglés.
I ho detalla amb més precisió, al Diari de navegació:
A las 14h 10m se oyó la detonación de un cañonazo y se vió el fogonazo, al poco rato unas luces por el costado de babor sin poder apercibir nada por estar la noche cerrada. Navegando a los rumbos de zig-zag pasamos la noche. Amanece, notando la falta del buque inglés que hace de Comodoro y una patrulla. A las 17h 40m aparece a flor de agua un submarino haciendo varios disparos, sin hacer ningun blanco. Un buque mercante del convoy tuvo el acierto de echarlo a pique de un cañonazo tardando diez munutos en hundirse. Requerido auxilio por los náufragos les fue prestado por un destroyer de S.M.B recogiendo 33 náufragos.
Del bombardeig i enfonsament del submarí, esdeveniment explicat pel jove Joan Espinàs, se n’ha pogut trobar documentació escrita que la complementa. Es tracta d’una de les poques ocasions en què un submarí alemany és enfonsat.
En canvi, es calcula que en el transcurs de la guerra, tot i que Espanya era un país neutral, aproximadament el 20% de la flota mercant espanyola fou enfonsada per aquests submarins.El motiu d’aquests enfonsaments era posar en perill el proveïment de mercaderies amb destinació a la Gran Bretanya. Amb la introducció a partir de 1918 de la navegació en comboi es va reduir dràsticament les pèrdues de bucs mercants dels aliats.
Resulta especialment interessant el fet que el comandant del submarí enfonsat fos Karl Dönitz, militar de la Marina Alemanya que posteriorment assoliria una gran importància i un rang altíssim en la II Guerra Mundial.
També en la correspondència de Joan Espinàs amb Carme Xivillé , hem trobat una menció a l’esdeveniment . Però no li explica. En una carta del 13 d’octubre li diu que “quan arribi, ja us ho explicaré”. És conscient, que durant tot el viatge, les cartes són llegides i censurades i prefereix només comentar les peripècies viscudes, la navegació en comboi, però obvia els fets relatius al submarí alemany, sense fer cap referència a l’esdeveniment bèl·lic:
Fecha memorable y de gran recuerdo ha de ser para los tripulantes del “Trini” la del 4 de Octubre, San Francisco de Asís, recalada de la isla Malta. Cuando llegue ya os contaré lo que pasó. Basta por ahora, que sepas que el “Pirata Teuton” rindió al Dios Neptuno en este dia, cuenta, de todos los actos que cometió, durante el tiempo que tuvo de vida. En mi anterior decía que habiamos salido de Port-Said el viernes dia 27 del mes pasado, salimos formando parte de un convoy compuesto de doce barcos mercantes, un noruego, un italiano, un griego, un francés, nosotros y los demás ingleses, todos armados, de Port-Said nos dirigimos al Nilo, el puerto de la isla Milo del archipielago griego, muy bonita bahia; punto estratégico para dirigir los convoyes a los Dardanelos y a Italia, estuvimos cuatro dias para ir, nosotros creiamos que luego nos hubieran mandado a Siracusa; no resultó asi, al cabo de dos horas y media, nos mandaban salir en un convoy compuesto de seis barcos mercantes, un destroyer inglés y tres pesqueros armados para Bizerta, colonia francesa en la region de Tunis, llegando alli, solos al cabo de cinco dias puesto que en la noche del cuarto a causa del temporal perdimos, a los compañeros, que habian quedado reducidos a tres y nosotros, cuatro, mercantes. Hoy hace ocho dias, a estas horas fondeábamos en el lago de Bizerta, y el martes por la mañana salíamos en convoy con otro barco francés que más que barco parecia una cafetera rusa; para Philipoville, para incorporarnos a otro convoy y salir para Marsella, pero en la misma noche habiendo perdido al celebre compañero por causa del mal tiempo, y tambien creo que por ciertas ordenes que dió el jefe del convoy fuimos para Marsella, pero habiendo escaseado el carbon, debido quizas a mas consumo a causa del temporal que nos estaba azotando parte del viaje, hemos tenido que entrar en este puerto, siendo ya el colmo de la desdicha, puesto que ni en pais español nos dejan saltar a tierra, dicen que a causa de haber tocado en paises de peste y tambien por la enfermedad reinante, cuyos resultados quisiera no hubieses tenido que pasar.