alta mar, 16 de juliol de 1917

Hace un mes que salimos de Barcelona y parece que fué ayer! Como pasa el tiempo! es decir como pasamos nosotros por este mar inmenso que se llama vida.

Despacio muy despacio va el carácter y el humor aclimatándose a las sensaciones de la ausencia, pero deprisa muy deprisa va intensificándose el recuerdo de los ausentes.

La vida de abordo durante este tiempo ha sido tranquila y apacible, parece como si Eolo tuviera temor de despertar del letargo en que está sumida la tranquila subdita de Neptuno. Asi no es de estrañar que cuando ya el Dios Febo se esconde en el horizonte para enviar sus rayos a otros mortales de la Tierra y empieza el cielo a coronarse de bellas constelaciones, apoyado cuando estoy de guardia, los brazos encima la barandilla que como balcon se levanta en la popa del barco, contemplando la inmensidad del océano y admirando en el firmamento esta grande y fantástica obra del Creador, cruzen por mi mente claramente como si la iluminasen la luz blanca de Régulus y de Arturus o la roja y centelleante de Aldebarán, infinidad de recuerdos, ilusiones y esperanzas. Unas que solo han dejado de su paso solo el recuerdo de haber existido y otras que en aquel momento se hacen grandes, muy grandes, como si el poder humano fuese incapaz de abarcarlas, y van agrandádose, hasta que la voz del oficial de guardia manda alguna maniobra y entonces esta voz parece anunciar el presagio de que nunca han de verse realizadas, puesto que al oirla, se desmoronan como castillo de naipes al soplo de un niño.(…)

Espero con ansias llegar a Jacksonville para encontrar cartas vuestras. Siguiendo así dentro de 10 días habremos llegado.(…)

Juan
Abordo de la corbeta Alfredo a 16 de Julio en la
                                                                    Latitud 22º 5’ N
                                                                    Longd 49º 40’ WG

< Carta anterior

Carta posterior >

Comments are closed.